Según en qué zonas de la geografía española, la morcilla puede ser más o menos conocida. Existen lugares de referencia, como puede ser Burgos, aunque los cerdos ibéricos de Huelva, ofrecen las mejores materias primas para elaborar estos embutidos tan sabrosos.
¿Qué es la morcilla?
La morcilla es un embutido que se realiza de una manera sencilla con sangre de cerdo ibérico condimentada y mezclada con otros ingredientes como pueden ser, por ejemplo, arroz, cebolla o incluso miga de pan. Existen múltiples formas de consumir este alimento: crudo, cocido, frito, a la plancha, etc. Según el tipo de morcilla que sea, es mejor tomarla de unas maneras u otras.
Diferencia entre morcilla y morcilla achorizada
Como hemos comentado, las morcillas suelen tener además de sangre y especias otros ingredientes que la hacen perfecta para asar o hacerla al horno.
La morcilla achorizada, como su propio nombre indica se parece un poco más a la textura del chorizo, ya que no va mezclada con nada más. Se elabora con carne y grasa de cerdo (una mezcla de chorizo y morcilla) a la que se le añaden especias y se embute en una tripa para su curado. ¡Buenísima y perfecta para tomarla cruda! Se trata de un sabor intenso y largo en el paladar, excelente para los amantes de los productos ibéricos.
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