¿Estás desesperado porque no sabes cómo hacer que tus hijos coman carne? A veces puede ser complicado que los niños tengan una dieta rica y variada tal y como nos gustaría, por eso tenemos que encontrar buenas recetas que nos den la posibilidad de explotar los sabores de la carne de cerdo ibérico, de excelente calidad y con un gran aporte de nutrientes para los más peques.
1.- Macarrones con carne y salsa de tomate. Se trata de una receta rápida y fácil: simplemente freímos la carne ibérica picada con un poco de cebolla (también muy picadita) y añadimos a los macarrones cocidos con salsa de tomate frito. ¡Este plato es prácticamente infalible!
Imagen: Adrián Merinero Sánchez | Flickr
2.- Hamburgesas ibéricas. Las hamburguesas suelen ser platos muy aceptados por los más pequeños, por lo que podemos aprovechar para introducir aquellas cosas que necesitemos. Por ejemplo, al hacer la hamburguesa podemos acompañarlas de verduras frescas. O si no, podemos elaborar una salsita de verduras para ponerla dentro del pan. ¡La imaginación es poder!
3.- Croquetas de jamón, chorizo o incluso de puchero. Las croquetas funcionan muy bien con los niños porque son suaves y muy fáciles de comer. Además, ofrecen múltiples posibilidades y te dan la opción de aprovechar las sobras: ¿hiciste un lomo de cerdo y sobró carne? ¿Quizá unos filetes de cerdo en salsa? Prácticamente cualquier cosa se puede aprovechar para hacer croquetas. ¡Prueba, verás como los peques se las comen sin rechistar!
Imagen: su-lin | Flickr
4.- Brochetas ibéricas. Las brochetas son ideales, porque además de ser saludables, se pueden hacer de muchos colores y son llamativos. Tanto con carne fresca como con longanizas o chorizos, se les pueden introducir multitud de verduras, y además, como se hacen a la plancha sin aceite prácticamente, son perfectos tanto para peques como para toda la familia. Eso sí, hay que asegurarse de que la carne sea ibérica, de calidad y por supuesto, elegir un corte de los más tiernos.
Imagen: Blog Me Haces Bien | Flickr
5.- Patatas rellenas. Las patatas rellenas son fáciles de comer, y se pueden también poner verduras y sabores que agraden a los pequeños. Se les puede añadir tomate y un poco de queso por encima para gratinar. ¡Y más fácil de comer imposible! ¿No te parece buena idea?
Imagen: George Wesley & Bonita Dannells | Flickr
